Un vehículo para la pastoral en la parroquia de San Pedro de Multán

El párroco Javed Khurshid, todavía joven, fue ordenado hace doce años y trabaja en la Diócesis de Multán. Su parroquia, San Pedro, está situada en las afueras de la ciudad de Multán y abarca no solo una parte de la ciudad, sino también una amplia zona rural con un radio de quinientos kilómetros.

La parroquia tiene nueve filiales a las que tiene que acudir con regularidad, pero hay muchos más pueblos donde también tiene que visitar a familias católicas aisladas. Cada semana recorre cientos de kilómetros para administrar los sacramentos, visitar a enfermos, oficiar funerales y mucho más. En Pakistán, donde los cristianos sufren discriminación y a menudo violencia, y donde suelen pertenecer al estrato social más bajo, la visita del sacerdote significa para los fieles esperanza, por lo que lo esperan anhelantes.

Sin un vehículo potente resulta imposible prestar este servicio, pero el párroco Khurshid solo dispone del coche que vienen utilizando los sacerdotes de la parroquia desde hace dieciséis años. Entretanto, cada viaje es una aventura porque el coche no deja de averiarse. Las reparaciones consumen cada vez más dinero, y el sacerdote nunca sabe si llegará puntual a donde los fieles le esperan. A veces utiliza el transporte público, pero este es poco fiable y le hace perder mucho tiempo. Por desgracia, no hay suficiente dinero para un vehículo nuevo.

Con 11.500 euros nosotros queremos contribuir a que el P. Khurshid pueda comprar pronto un coche nuevo para poder visitar a sus creyentes sin la incertidumbre de si llegará o no.

Our Task Areas
Our Regional Activities
Press contact

Latest News

La agitación política en Siria sigue afectando a las comunidades cristianas. Conozca cómo se han visto afectadas sus vidas....
Hay que estar profundamente convencido de abrazar este servicio. Son personas dispuestas a ofrecer sus vidas, hasta el final, por Cristo...
A veces me siento impotente al ver problemas por todas partes, pero ser testigo de la maravillosa labor de nuestra Iglesia me recuerda que aún hay esperanza....