En muchas regiones, los fieles son tan pobres que no son capaces de mantener a sus sacerdotes. Incluso a los obispos les faltan a menudo los recursos económicos necesarios para garantizar la manutención regular de aquellos. En estos casos, los estipendios de misas son a menudo su único sustento. Los estipendios de misas son donativos asociados a peticiones de celebración de la Santa Misa por personas difuntas, enfermos u otras causas.
En 2023 se celebraron un total de 1.744.410 misas a petición de nuestros benefactores, lo que nos permitió ayudar económicamente a un total de 40.767 sacerdotes, es decir, a uno de cada diez aproximadamente en todo el mundo.
La distribución de estipendios de misas refleja al mismo tiempo el grado de pobreza en los distintos continentes. En el año al que se refiere este informe, un 37,3% de los estipendios de misas se envió a África, un 32,1% a Asia y Oriente Próximo, un 16,6% a Latinoamérica y un 14% a Europa Central y del Este.
Los estipendios de misas son la única fuente de ingresos de algunos sacerdotes
Cuando en la misa se reza por familiares fallecidos o enfermos, por personas sometidas a crisis psicológicas o para satisfacer peticiones concretas del donante, éste participa de un modo especial en la celebración de la Eucaristía. En esta manera de donar, muchos de nuestros benefactores reconocen el profundo sentido religioso de asociar su acción caritativa a la oración de la Iglesia.
Los destinatarios reciben siempre el 100% de los estipendios de misas. De media, cada 18 segundos se celebra una misa en algún lugar del mundo a petición de los benefactores de ACN.