Nuestro Señor no dijo exactamente estas palabras en la Biblia, pero, no obstante, estas medicinas que habéis donado son realmente regalos de misericordia. Ya que, sin ellas, muchos de los 3.000 pacientes de la Clínica de San José en la ciudad de Ankawa, en el norte de Irak, no sobrevivirían. Estos pacientes, muchos de ellos con enfermedades crónicas, son sólo unos cuantos entre las más de 12.000 familias cristianas que fueron forzadas a dejar sus hogares en Mosul y Nínive en el verano de 2014, tras la invasión del Estado Islámico....