El Padre Tobias Bature, sacerdote de la diócesis de Maiduguri en el Estado de Borno en Nigeria, estuvo visitando la sede central de la Fundación Pontifica ACN que apoya la reconstrucción material y espiritual de la diócesis que ha sufrido durante muchos años la violencia y el terror del grupo islámico Boko Haram.
ACN: ¿Cómo está la situación en el Estado de Borno en estos momentos?
Padre Tobias Bature: Se puede decir que hay una pequeña mejora en la situación actual en el estado de Borno: la gente que había huido del terror está regresando a sus casas y al trabajo… no es que haya mejorado la situación laboral. En realidad hay mucho desempleo pero la gente vuelve al trabajo de antes. Porque durante esta crisis incluso la gente que tenía una ocupación no iba a trabajar. Algunas personas encontraron sus propias casas destruidas. Otras habían sido víctima del vandalismo. Por lo tanto, tienen que comenzar una nueva vida, hacer frente a la situación. Es difícil, pero hay organizaciones en Maiduguri que ayudan a esas personas para que puedan comenzar una nueva vida así que algunas personas han regresado a sus casas, tratando de renovarlas y hacer su vida normal. Por eso se puede decir que la situación está mejorando.
¿Sigue habiendo muchos desplazados?
Sí, todavía hay muchos refugiados, pero no como antes. El número de personas desplazadas es menor porque algunos han sido re-asignados a sus lugares de origen y otros de los que vinieron de áreas rurales han regresado. Sigue habiendo campamentos de IDPs en Maiduguri pero hay menos refugiados que antes.
Se pensaba que el grupo terrorista Boko Haram estaba más debilitado, pero siguen llegando noticias de secuestros y atentados. ¿Cómo ven la situación los habitantes de Maiduguri?
Las personas de Maiduguri perciben una falta de transparencia y veracidad por parte del gobierno. Los ciudadanos creen que no están informados de verdad. El gobierno dice que han conquistado al grupo de insurgencia, y las cosas están mejor… y bueno, es verdad, estamos mejorando, pero lejos de la normalidad, y desde luego no como la gente esperaba. Todavía hay secuestros, el último en Dapchi en el estado de Yobe, que está muy cerca de Maiduguri.
Exactamente después salió la noticia de que Boko Haram había liberado a todas las niñas, excepto una que seguía retenida por ser cristiana. ¿Sabe algo de esta historia?
Alrededor de 166 niñas han sido secuestradas, tienen entre 14 y 15 años, niñas de escuela secundaria. La escuela secundaria se encuentra junto a la zona de misión de Saint Mary Damatro. Yo solía ir allí a decir misa. Conozco el lugar muy bien. Como dice una de las secuestradas no fue liberada porque se negó a abandonar su fe cristiana. Ella no quería renunciar al cristianismo y convertirse en musulmana. Entonces se negaron a liberarla, ella todavía está con los terroristas. De las otras chicas, algunas eran musulmanas, y algunas renunciaron a su fe y aceptaron. No hay noticias sobre la chica que renunció a la conversión. Las últimas noticias que escuché sobre ella, fueron que la gente estaba orando por ella, para que no la mataran, pero preservaran su vida. La chica está en algún campamento de Boko Haram, las que fueron liberadas regresaron a casa.
¿Qué hace la iglesia local para ayudar a todos los que han sufrido durante años la violencia y la persecución?
La iglesia local en la diócesis de Maiduguri ha trabajado duro para apoyarlos; proporcionando cosas pequeñas, como comida, para ellos. Sé que Mons. Doeme, el obispo de Maiduguri, ha distribuido ayuda alimentaria más de cinco veces. Consiguió comida y luego nos pidió a todos los sacerdotes de la metrópoli que lo acompañáramos y repartiéramos a todos. Gracias al apoyo de ACN también se ha podido ayudar a las viudas proporcionándoles una especie de pequeño fondo para rehacer sus vidas mediante pequeñas iniciativas de comercio, así como a los huérfanos con becas escolares.
Además de la ayuda material se necesita ayuda psicológica para curar los traumas, ¿es así?
Si, con respecto a los traumas Mons. Doeme ha asignado algunos sacerdotes para ayudar organizando cursos, lo que llamamos talleres, escuchando a la gente y tratando de sacarlos de su situación. Los sacerdotes han recibido una formación psicológica especial de personas procedentes de Abuja. Organizaron un curso de entrenamiento especial en Maiduguri para los sacerdotes que duró al menos seis meses. Ahora se organizan en las instalaciones de la iglesia cursos especiales, se invita a los afectados a acudir y les hablan y tratan de instruirlos sobre la situación. Todos los sacerdotes que viven en la metrópoli han participado y están involucrados, para los sacerdotes en las zonas de misión es más difícil participar.
¿ACN está apoyando la reconstrucción del seminario menor, también fue atacado y destruido por Boko Haram, tiene noticias de este proyecto?
El proyecto está en marcha. El rector, el padre Alex Misquita, está de vuelta en el Seminario Menor junto con otros tres sacerdotes. Los edificios no están completamente listos, pero los estudiantes y los maestros ya están viviendo allí. Cinco de los estudiantes son de mi parroquia. Al igual que la Escuela Bíblica, que también está arrancando, donde se han asignado dos sacerdotes allí.
