[vc_row][vc_column][vc_column_text]Su madre fue violada por milicianos de Daesh, se quedó embarazada y los ancianos de su tribu querían matar al bebé. Pero fue salvado, “algo que sólo podía haber pasado ha sido posible gracias a la Iglesia”
Un bebé salvado de la muerte en Irak. Esta es una historia del triunfo del bien sobre el mal. Y ha ocurrido en tierra iraquí, donde el mal, a través de los terroristas del Daesh durante tres años, ha acampado a sus anchas por estas tierras arrasando la vida de muchos pueblos y minorías religiosas.
Una adolescente fue secuestrada y violada por estos milicianos extremistas. Como ella, miles de mujeres de minorías étnicas y religiosas. Sin lugar a dudas han sido las grandes víctimas de este genocidio convertidas en esclavas sexuales de los fanáticos.
Según ha podido saber Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), esta muchacha se quedó embarazada y ante la noticia los ancianos de su tribu tomaron la decisión de matar al bebé tan pronto naciera. Esta minoría consideró que no podía dejar vivir un bebé concebido por el Daesh, para ellos, prácticamente el demonio.
Sin embargo, esta joven no quería matar al bebé que llevaba en sus entrañas. Alguien le puso en contacto con la iglesia cercana, y así esta joven dio a luz y entregó el niño al cuidado de las religiosas que lo acogieron en un orfanato. Durante un mes ha sido atendido con todo el amor del mundo. La madre se encuentra bajo medidas de protección para que no sufra violencia por su decisión.
El testigo anónimo que presenció los hechos y que ha tenido al bebé en brazos ha asegurado a Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN): “quiero que oigan algo bueno que ha sucedido con la iglesia aquí. Algo que sólo podía haber pasado gracias a la presencia de la Iglesia: un ejemplo de vida y de por qué nuestra presencia es tan importante aquí”.
Esta historia acaba con la acogida y la adopción del bebé un mes después por parte de una familia cristiana. Que con seguridad educará a su nuevo hijo en el amor y en el perdón. Algo que sólo aportan los cristianos hoy por hoy en Irak y en todo Oriente Medio. El mal nunca tiene la última palabra.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]