Filipinas es el único país de Asia mayoritariamente cristiano. Más del 80% de los 100 millones de habitantes de este país insular son católicos. El año 2020 también estuvo allí marcado por la pandemia de coronavirus. Las iglesias estuvieron cerradas desde marzo hasta mediados de julio. Después, los servicios religiosos pudieron reanudarse con restricciones, y las Navidades pudieron celebrarse solo en grupos reducidos. ACN ayuda a sacerdotes y religiosos durante la pandemia con subsidios de manutención y estipendios de Misas.
La crisis del coronavirus se ha convertido en una dura prueba para los filipinos, en su mayoría muy creyentes. La atención pastoral es muy importante en esta difícil coyuntura, ya que en las iglesias solo pueden reunirse unas pocas personas. Esto ha aumentado las peticiones de consejo y ayuda dirigidas a sacerdotes y religiosos. Pero la falta de colectas debida al confinamiento hizo que el sustento de estos dejara de estar garantizado. Por eso, en 2020 ayudamos a los sacerdotes sobre todo con estipendios de Misas.
En Mindanao, el terrorismo no tiene trazas de acabar.
Para la Iglesia local, lo más preocupante al margen de la pandemia sigue siendo la situación en el grupo de islas de Mindanao. Como esas islas están habitadas por numerosos musulmanes, en los últimos años han operado allí grupos terroristas islámicos que pretenden instaurar una nación islámica. Las acciones de los yihadistas se han centrado sobre todo en la ciudad de Marawi.
En mayo de 2017, cientos de ellos asolaron prácticamente la ciudad: asesinaron a personas, causaron graves daños a la catedral católica de Santa María y tomaron numerosos rehenes, en su mayoría cristianos. Miles de habitantes de la ciudad pudieron huir, y desde entonces viven en campamentos de refugiados. La tregua pactada entre el gobierno y el Nuevo Ejército del Pueblo (New People‘s Army) durante la pandemia no se ha respetado. Representantes de la Iglesia local han informado a ACN de que los combates siguen produciéndose. No obstante, la presencia militar se ha hecho algo menos visible.
Estudiantes ayudan a losrefugiados de Marawi
Los refugiados procedentes de la ciudad de Marawi, destruida por el terrorismo islamista, malviven desde 2017 en varios campa-mentos y tienen necesidad de ayuda urgente. Por eso, la Iglesia local puso en marcha la iniciativa interreligiosa “Youth for Peace”, en la que estudiantes cristianos y musulmanes ayudan a los refugiados de Marawi.
Hasta finales de 2020, 175 estudiantes tomaron parte en esta iniciativa. Con su ayuda, deseaban servir de testimonio de que la convivencia pacífica tras los terribles sucesos ocurridos en 2017 aún es posible, independientemente de las creencias religiosas de cada persona. ACN ha financiado este proyecto desde 2018 con un total de 75.000 euros.