La Diócesis de Lisala es una de las diócesis más antiguas y, con sus más de 67.600 kilómetros cuadrados, una de las más extensas de la República Democrática del Congo. Se encuentra en el norte del país y por su territorio discurren el río Congo y varios de sus afluentes.
Las vías fluviales son allí muy importantes para la vida de Iglesia, y el barco Magnificat es un medio de transporte importante para la pastoral. Por desgracia, este sufrió graves daños en septiembre de 2018 cuando fue sorprendido por una tormenta en su trayecto a Kinshasa en un lugar en el que no podía amarrar. La tormenta arrojó el barco contra un árbol de la orilla, abriendo un enorme boquete, y el agua entrante hizo que se hundiera casi por completo. Las personas que se encontraban en el barco lograron salvarse, pero los daños materiales son elevados y la operación de salvamento del barco fue difícil. Un sacerdote y otras personas tuvieron que desplazarse en piraguas cruzando el río hasta el lugar del accidente.
Al principio intentaron ellos mismos reparar y volver a poner en marcha el barco, pero pronto quedó claro que era mucho más difícil de lo esperado y que necesitaban más material y personal cualificado. Dos motores están averiados, y también para la reparación de los boquetes se requiere material y mano de obra cualificada.
Para que este barco misionero pueda volver a funcionar pronto, hemos prometido apoyarlos con 8.800 euros.