ENTREVISTA a Mons. William Kyrillos, Obispo de Assiut, durante su vista a la oficina nacional de la fundación pontificia ACN en Brasil. Por Rodrigo Arantes (ACN Brasil)
ACN – ¿Qué significa ser cristiano en Egipto hoy en día?
MONS. KYRILLOS – El significado de ser cristiano en Egipto radica en la alegría de ser la sal, la sal que da vida, que da sabor a la vida. Es el fermento que modifica un puñado de harina, en el sentido de que modifica la sociedad y marca la diferencia. Ser testigo de la alegría del Resucitado a pesar de las dificultades y las tristezas. El Evangelio no nos engañó cuando Cristo dijo que ‘si me persiguieron a mí, también os perseguirán a vosotros, pero no tengáis miedo porque yo estaré con vosotros y nadie os quitará la alegría que yo voy a ofrecer’. Es esa alegría la que nosotros vivimos incluso en los momentos de persecución y de tristeza.
ACN – ¿Y qué riesgos corre alguien por ser cristiano en Egipto?
MONS. KYRILLOS – El desafío de ser cristiano reside en que el mero hecho de serlo ya supone una dificultad. Y es así porque existe un grupo extremista que piensa que la salvación solo puede existir con una religión, a saber, el Islam. Y esta minoría perturba la existencia de los cristianos, porque persigue el objetivo de eliminarlos. Pero nuestra confianza está en las palabras de Jesús, que dice: ‘Ni un solo cabello de vuestra cabeza se caerá sin mi orden’.
ACN – ¿Cómo se sienten los cristianos egipcios al ser perseguidos en la misma tierra que un día acogió a Jesús y a sus padres al huir de Herodes?
MONS. KYRILLOS – Egipto siempre fue una tierra de acogida. Pero es cierto que cuando los extremistas –la Hermandad Musulmana– alcanzaron el poder y la presidencia, dijeron en público: ‘Vamos a echar a los cristianos, todos tienen pasaportes, los vamos a mandar a Estados Unidos y Canadá y vamos a convertir Egipto en un califato, en una república musulmana’. Los cristianos respondimos: ‘Esta tierra es nuestra y jamás vamos a dejarla, y vosotros no viviréis en Egipto sin nuestra presencia y nosotros no viviremos en Egipto sin la vuestra. El Santo Padre Benedicto XVI dijo tras el Sínodo para las Iglesias Orientales que Oriente Próximo no sería Oriente Próximo, sin esa minoría de cristianos. Por tanto, para ser Oriente Próximo tiene que contar con los cristianos. Antes de la invasión de los árabes, los cristianos ya tenían su civilización y después se adaptaron a la vida con los musulmanes, todos pueden continuar conviviendo juntos hasta el fin.
ACN – ¿Qué expectativas se abren para los cristianos en Egipto tras la reciente visita del Papa Francisco?
MONS. KYRILLOS – Sin duda, la visita del Santo Padre a Egipto fortalece la presencia de los cristianos y demuestra que este pequeño rebaño de católicos y latinos en Egipto, que son menos de 92.000, no está aislado. Todos los católicos del mundo están con nosotros. Desde el punto de vista ecuménico con los cristianos en general, esta visita es la semilla de frutos aún mejores, en especial de la Iglesia Católica con la Iglesia Ortodoxa, al encontrarse el Papa con su líder, Su Santidad Tawadros II, y firmar documentos de aproximación que constatan que ‘lo que nos une es mucho más de lo que nos separa’. La visita ha mostrado también la voluntad del actual Papa de la Iglesia Copto-Ortodoxa de aproximarse a la Iglesia Católica, mucho más que su antecesor fallecido. Eso hace que los lazos entre las Iglesias Católicas Orientales, la Iglesia Católica Latina y la Iglesia Ortodoxa se vuelvan más firmes. Respecto a los musulmanes, esta visita también ha derribado una barrera surgida por el malentendido en torno a unas palabras pronunciadas por el Papa Benedicto XVI. La visita ha propiciado que los musulmanes estén más abiertos al diálogo con los cristianos, especialmente, gracias al fraternal abrazo que el Santo Padre dio al Gran Imán de la mezquita y universidad de Al Azhar. La fotografía de este gesto que está recorriendo el mundo entero nos recuerda al abrazo que San Francisco de Asís dio al sultán de la época hace 800 años en Egipto. Además, el Papa ha reiterado su respeto hacia los musulmanes y ha dicho que toda esta violencia y terrorismo perpetrados en nombre de Dios, Alá o en nombre de la religión son una falsedad y una injuria dichas por los terroristas. Los actos de estos no son actos religiosos. El Papa elogió el trabajo del actual presidente egipcio, que en poco tiempo está modificando la imagen del país convirtiéndolo en un país más moderno, que se preocupa por el país y por sus hijos, por los ciudadanos.
ACN – ¿Qué ha hecho la fundación pontificia ACN en Egipto?
MONS. KYRILLOS – Ayuda a la Iglesia Necesitada ha prestado un gran apoyo en Egipto. En una ocasión, en un encuentro con el Presidente de ACN en Alemania, me quedé sorprendido cuando me mostró la lista de ayudas prestadas a mi diócesis en los últimos diez años, equivalentes a una alta cantidad de dinero. Gracias a esas ayudas se han construido iglesias, futuros sacerdotes han terminado sus estudios, han sido construidos conventos para religiosas, se han comprado vehículos, etc., y todo destinado a la labor pastoral. Y también me quedé muy sorprendido al saber cuántas diócesis e Iglesias locales del mundo entero colaboraron para que nosotros pudiéramos manteneros, porque no hay otras fuentes financieras. Los sacerdotes viven de los estipendios de Misas que reciben anualmente, y las cantidades son pequeñas. Pero aparte de la ayuda económica, mucho más importante en la labor de ACN es la voz que les presta de cara al mundo para que sean escuchados los cristianos que no tienen una voz en sus propios países. Esto es muy apreciado y muy importante para aquellos que se siente excluidos y discriminados. Agradezco a Ayuda a la Iglesia Necesitada que sea una Fundación muy bien organizada que difunde la voz de los cristianos por todo el mundo. Además, ACN hace llamamientos al mundo entero para que las personas se unan en la oración por un pueblo, por un país. Este gesto es muy importante, porque la oración comunitaria mueve montañas. Yo mismo he visitado varias oficinas de ACN en el mundo y lo que he notado es que la espiritualidad en todas ellas era igual, es algo que me ha llamado mucho la atención. Tanto los empleados de estas oficinas como los voluntarios que trabajan en ellas comparten una espiritualidad profunda. ¡Eso es fantástico!
ACN – Detrás de toda esa ayuda que llega a Egipto hay miles de benefactores que, muchas veces, solo pueden donar una pequeña cantidad, pero que no dejan de contribuir a esta labor. ¿Qué les diría usted a estas personas?
MONS. KYRILLOS – Estas personas son los santos de los tiempos presentes. Son aquellos que imitan a la viuda que deposita dos moneditas para los que más lo necesitan. De estas personas podemos aprender a vivir el Pentecostés.
ACN – ¿Cómo logra usted mantener siempre un rostro calmado, incluso en medio de tantas preocupaciones?
MONS. KYRILLOS – El Papa Juan XXIII, que afrontó enormes problemas en el ejercicio de su pontificado, siempre llevaba sus problemas al Tabernáculo y allí los dejaba, diciéndole a Dios: ‘Estos problemas no son míos, son tuyos. ¡Encárgate de ellos!’. El Papa Francisco tiene en su escritorio una imagen de San José Dormido, y cada vez que tiene un problema lo escribe en un papel y dice: ‘Estás durmiendo, pero sueña con mi problema y dame la solución’.