NUEVA YORK / KÖNIGSTEIN, martes 16 de abril de 2019 – El Arzobispo Bernardito Auza, Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas y presidente de la Fundación Camino a la Paz, ha anunciado que Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN) recibirá el Premio Camino a la Paz 2019.
La Misión de la Santa Sede dijo que ha optado por honrar a ACN en reconocimiento por su apoyo humanitario y pastoral a los cristianos perseguidos.
La Fundación Camino a la Paz apoya varios aspectos del trabajo de la Misión de la Santa Sede ante la ONU. La Fundación también financia proyectos humanitarios en países en desarrollo.
Thomas Heine-Geldern, Presidente Ejecutivo de ACN Internacional, recibirá el Premio en la cena anual de Camino a la Paz, el próximo 22 de mayo en Nueva York. “Recibir este Premio excepcional es un gran honor para Ayuda a la Iglesia que Sufre”, dijo Thomas Heine-Geldern. Añadió: “Es un reconocimiento al puente de amor mundial construido por la generosidad de nuestros benefactores y la Iglesia que sufre y es perseguida”.
Los ganadores anteriores del Premio Camino a la Paz incluyen a el cardenal Mario Zenari, nuncio apostólico en Siria y a la Reina Sofía de España.
Fundada en 1947 por el padre Werenfried van Straaten (1903 -2003) para ayudar a los refugiados y desplazados en la Alemania posterior a la Segunda Guerra Mundial, ACN apoya más de 5.000 proyectos cada año en más de 140 países.
Los proyectos incluyen la construcción de iglesias y capillas; apoyo a la formación de seminaristas, religiosos y religiosas, así como a catequistas laicos; ayuda de emergencia; y transporte para sacerdotes y religiosas. El año pasado, los donantes de ACN dieron más de 100 millones de euros en ayuda. Desde 2011, ACN ha proporcionado más de 70 millones de euros para apoyar a cristianos sirios e iraquíes amenazados por ISIS y otros grupos islamistas, asegurando la supervivencia del cristianismo en la región.