by Xavier Bisits & Iban de la Sota
Como parte de sus labores de reconstrucción en la Llanura de Nínive en Irak, la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) ha comenzado a trabajar para restaurar las casas de otras 41 familias cristianas en el pueblo de Bartella. Aproximadamente 220 personas más se beneficiarán de este proyecto, el último del programa de ACN por el cual la Fundación ya ha contribuido a renovar más de 2.000 casas en la región.
Antes de la invasión del Estado Islámico (EI) en 2014, Bartella era una ciudad de 3.500 familias cristianas (alrededor de 17.500 personas, entre ellas unos 12.300 siro-ortodoxos y unos 5.200 siro-católicos). Cuando regresaron después de la liberación de la ciudad en 2016, se encontraron con sus iglesias profanadas y la bandera negra del EI Daesh colgada en los muros. Además, sus casas habían sido pasto del fuego, saqueadas y dañadas con el fin de impedir que los cristianos pudieran regresar. Otros hogares fueron destruidos por los ataques aéreos durante la liberación.
Para marcar el comienzo de esta misión se celebró el 5 de junio de 2019 una ceremonia con oraciones cantadas en siríaco, un dialecto arameo. P. Andrzej Halemba, jefe de la Sección de Oriente Próximo de ACN dirigió un mensaje a las familias en el cual comparó a los cristianos iraquíes con familias del Antiguo Testamento que tuvieron que reconstruir Jerusalén después de su destrucción y les pidió que rezaran por los benefactores de AIN. A continuación, unos olivos bendecidos fueron entregados a cada familia, simbolizando la esperanza de que la paz volverá a la región tras muchos años de guerra, y que estos árboles, plantados en los jardines de las familias, darán fruto.
Después de la invasión de Mosul y la Llanura de Nínive en el verano de 2014, la fundación pontificia ACN proporcionó comida, alojamiento, medicinas y educación para los cristianos y otros desplazados que llegaban a Erbil y a otros lugares. Una vez que las comunidades comenzaron a regresar a sus hogares después de la expulsión del EI, la Fundación pontificia comenzó a reconstruir casas, conventos, iglesias y otras estructuras. Los benefactores de ACN donaron 42.622.212 euros para la ayuda a Irak desde 2014 hasta mayo de 2019.