San Juan Pablo II fue el Papa de la juventud, a la que conminó desde el principio: “Con la vivacidad que es propia de vuestros años, con el entusiasmo generoso de vuestro corazón, caminad al encuentro de Cristo: sólo Él es la solución de todos vuestros problemas; sólo Él es el camino, la verdad y la vida; sólo Él es la esperanza de la humanidad” .
Para implementar estos objetivos en la vida personal, el Centro Juvenil Juan Pablo II de Sarajevo ofrece muchas ayudas, aprovechadas cada año por más de diez mil jóvenes de toda Bosnia y Herzegovina. Entre ellas se incluyen campamentos de verano y de formación para voluntarios, jornadas de oración y reflexión por grupos de edad, días de la juventud, caminatas Vía Crucis, peregrinaciones y grupos de debate interreligiosos. Doce empleados a tiempo completo, veinte a tiempo parcial y 300 voluntarios organizan estos programas que, a raíz de la crisis del coronavirus, tuvieron que ser parcialmente anulados o remodelados. Las actividades en línea se ampliaron para ello: entrevistas, impulsos espirituales, seminarios en línea y asesoramiento para jóvenes con problemas psicológicos… las visitas al sitio webse multiplicaron por diez. No hay toque de queda para la verdad, pero, desafortunadamente, tampoco para los gastos corrientes del cen
tro, que suman unos 100.000 euros. El centro juvenil solicitó ayuda urgente y nosotros prometimos 30.000 euros.
También los Hermanos de San Juan de Adís Abeba, Etiopía, tuvieron que adaptar las actividades de su pastoral juvenil a las circunstancias: así, los campamentos de verano se volvieron más pequeños, pero más numerosos, y algo similar se hizo con los cursos de Fe y Filosofía para los estudiantes. Además, las visitas a los huérfanos y a las residencias de ancianos siguen siendo importantes para la educación del corazón de los jóvenes, tomando las precauciones necesarias. Según el P. Athanase Markarian, el objetivo era y sigue siendo eliminar miedos entre niños y jóvenes. Aquí hemos prometido 10.000 euros.