Tras la caída de la Unión Soviética, Lituania, Estonia y Letonia se hicieron independientes en 1991 y pasaron a formar parte de la Unión Europea en 2004. Lituania, el país más meridional y de mayor tamaño de los tres estados bálticos con 2,8 millones de habitantes, es el único país de la antigua Unión Soviética con una mayoría católica del 80% de la población, mientras que los católicos en Estonia y Letonia son solo una minoría. En el Báltico, ACN apoya sobre todo medios de comunicación católicos, la formación de sacerdotes y la atención a niños y jóvenes en las comunidades parroquiales.
Durante la época soviética, varias generaciones crecieron sin haber recibido ninguna instrucción en la fe. Y muchas personas siguen aún hoy en busca de orientación espiritual. Para responder a sus preguntas, es importante ofrecer iniciativas al alcance de todos. Los medios de comunicación son muy útiles a este respecto. Por eso, ACN apoya desde 1993 a la emisora de radio católica “Mazoji Studija” (pequeño estudio) en la ciudad lituana de Vilna, que contribuye de manera importante a la evangelización.
En Letonia, solo una cuarta parte de los aproximadamente 1,9 millones de habitantes es católica. La mayor confesión es la de los luteranos, con un 34% de la población. En el periodo contemplado por este informe, ACN financió allí la formación de religiosas, ofreció ayudas para tareas de renovación y apoyó la realización de un documental sobre el obispo Sloskans que en la época soviética fue encarcelado a causa de su fe y sometido a trabajos forzados en las más duras condiciones. La historia de este obispo, quien desde entonces se ha convertido en un amigo y compañero de ACN, es un ejemplo para muchos.
Aquí muchas personas buscan orientación espiritual
En Estonia, los católicos constituyen una minoría muy pequeña, inferior al 2%. La confesión cristiana con mayor representación es la de los cristianos ortodoxos –compuesta, sobre todo, por personas de origen ruso–con un 16%, seguidos por los luteranos con un 10%. En este país, ACN ha financiado principalmente trabajos de construcción y ha ayudado a los sacerdotes con estipendios de Misas. En los países bálticos, ACN también apoya a niños y jóvenes financiando con regularidad campamentos de verano cristianos.