En Pakistán, un cristiano saldrá, por fin, de la cárcel tras ser absuelto por el tribunal en un proceso que se ha prolongado más de once años, tras casi setenta aplazamientos.
Imran Masih, un católico de Faisalabad, fue condenado a cadena perpetua por blasfemia después de que testigos presenciales afirmaran que en julio de 2009 prendió fuego a libros que contenían versos del Corán....