[vc_row][vc_column][vc_column_text]«Estos ataques no minarán la unidad de la comunidad egipcia». Éstas son las palabras que el Papa Tawadros II, patriarca ortodoxo de Alejandría y jefe de la Iglesia Copta Ortodoxa, dirigió a una delegación de la sección italiana de Aid to the Church in Need (ACN) que, junto a su director Alessandro Monteduro, fue recibida en audiencia en la sede del Patriarcado Ortodoxo de Alejandría.
El Primado de la Iglesia Copta Ortodoxa – la comunidad cristiana más grande de Oriente Medio, que cuenta con alrededor de 15 millones de fieles (2 millones de ellos en la diáspora) – cree que el objetivo final de los numerosos ataques que han ensangrentado Egipto recientemente es dividir al pueblo egipcio. «Pero tenemos mucho cuidado de reafirmar nuestra unidad después de cada masacre», insiste, explicando que la Iglesia Copta Ortodoxa también se ocupa de las familias de las víctimas y de los heridos en los atentados, una tarea que ha impulsado el establecimiento de una oficina ad hoc dentro del patriarcado. «¡Ayúdenos a apoyar a las familias de nuestros mártires!», agregó, dirigiéndose a la comunidad católica italiana.
«Hemos expresado al Papa Tawadros nuestra profunda simpatía y solidaridad con esta Iglesia martirizada», dijo el director de ACN Italia, Alessandro Monteduro, después de la reunión, que simbólicamente tuvo lugar en la fiesta de la Conversión de San Pablo y al final de la semana de oración por la unidad de los cristianos, así como en el séptimo aniversario del comienzo de las revueltas de la Plaza Tahrir de El Cairo.
Durante los días que pasó en Egipto la delegación de ACN, que también incluyó al obispo Francesco Cavina de la diócesis italiana de Carpi, pudo visitar los lugares afectados por los ataques más recientes contra la comunidad cristiana y reunirse con las familias de las víctimas. Entre ellos estaba Maryam, la esposa del vigilante de la iglesia de San Pedro y San Pablo en El Cairo, que murió en el atentado de diciembre de 2016. «Inmediatamente nos dijo que había perdonado a los asesinos de su marido», explicó Monteduro. La mujer agregó: «Nosotros los cristianos sabemos que estamos expuestos y estamos listos para morir por nuestra fe».
La delegación pudo ver las numerosas medidas de seguridad que se habían tomado para proteger a todas las iglesias. «Pero lo que más nos impactó durante este tiempo», añadió el director de ACN Italia, «fue el vigor y la belleza de la fe de los cristianos coptos de Egipto que, a pesar de los ataques y del terror causado por los actos de los grupos fundamentalistas islamistas, no dejan de congregarse en sus lugares de culto «.
La comunidad copta es realmente fuerte, pero aun así necesita nuestra ayuda. «Es importante que los cristianos italianos regresen a Egipto, siguiendo los pasos de la Sagrada Familia», insiste Monteduro. «Nuestros hermanos realmente nos necesitan y es la mejor manera de demostrarles que todos juntos formamos una sola comunidad cristiana». En Egipto también hay una Iglesia Copta Católica con unos 200.000 fieles.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
